“El arte es capaz de expresar y de hacer visible la necesidad del hombre de ir más allá de lo que ve, manifiesta la sed y la búsqueda de lo infinito.”
Hablando a los fieles reunidos en Castel Gandolfo para la audiencia general del 31 de agosto de 2011, (en el exterior del palacio pontificio) el Papa invitó a redescubrir en las expresiones artísticas una «parte del camino de la belleza que el hombre de hoy debería recuperar en su significado más profundo».
Durante siglos los pintores «mojaron su pincel en ese alfabeto colorido que es la Biblia ». Benedicto XVI cita una expresión de Marc Chagall para reafirmar la convicción de que el arte es una de las vías más sugestivas y eficaces para encontrar a Dios.
En esta perspectiva la obra de arte se convierte en «una puerta abierta hacia el infinito, hacia una belleza y una verdad que van más allá de la cotidianidad».
Una experiencia que cada uno puede vivir ante una escultura, un cuadro, una obra arquitectónica, una poesía, un fragmento musical. El propio Benedicto XVI confió que todo ello lo vivió más de una vez, recordando en especial los sentimientos que le suscitó un fragmento musical de Bach durante un concierto dirigido por Leonard Bernstein en Munich.
En el siguiente link se puede leer el texto completo con el que el Papa se dirigió a los fieles en la catequesis de Castel Gandolfo con respecto a contemplar en ciertas expresiones artísticas verdaderas sendas hacia Dios.
http://www.vatican.va/holy_father/benedict_xvi/audiences/2011/documents/hf_ben-xvi_aud_20110831_sp.html
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